3. LA FE SOBRENATURAL La fe es necesaria para la salvación . “Sin la

3. LA FE SOBRENATURAL La fe es necesaria para la salvación . "Sin la fe es imposible agradar a Dios" (Hebr 11,6)

1. Noción y objeto de la fe El acto de fe :es la respuesta del hombre a Dios que se revela . Por la fe el hombre somete completamente su inteligencia y su voluntad a Dios. La Sagrada Escritura llama a este asentimiento "obediencia de la fe" (cfr. Rom 1,5; 16,26).

La virtud de la fe es una virtud sobrenatural que capacita al hombre —ilustrando su inteligencia y moviendo su voluntad— a asentir firmemente a todo lo que Dios ha revelado, no por su evidencia intrínseca sino por la autoridad de Dios que revela.

- La fe es adhesión personal del hombre a Dios. - También es asentimiento libre la verdad revelada.

2. Características de la fe La fe es un don de Dios. Una virtud sobrenatural. Es necesaria la gracia. No basta la razón. Es un acto humano. No es contrario ni a la libertad ni a la inteligencia.

SANTO TOMAS DE AQUINO, Summa Theologiae, II-II, q.2, a.9 Creer es un acto del entendimiento que asiente a la verdad divina por imperio de la voluntad movida por Dios mediante la gracia”. La fe es una invitación Fe y libertad: El hombre, al creer, debe responder voluntariamente a Dios; nadie debe estar obligado contra su voluntad a abrazar la fe.

Cristo invitó a la fe y a la conversión, Él no forzó jamás a nadie. Dio testimonio de la verdad, pero no quiso imponerla por la fuerza a los que le contradecían. Fe y razón: Jamás puede haber desacuerdo entre ellas. Las realidades profanas y las realidades de fe tienen su origen en el mismo Dios.

Como dice el profesor de la Universidad de Navarra, doctor en Ciencias Físicas, Mariano Artigas: la Ciencia nunca se ha opuesto a la Religión, y nunca se podrá oponer, porque no hay oposición real. Es más, añadió: Hoy se puede afirmar como un hecho patente que los grandes científicos, prácticamente sin excepción, están de acuerdo en que no hay oposición real entre Ciencia y Religión .

Dos mil trescientos miembros de la Asociación Norteamericana de Científicos admiten ser creyentes. No hay ningún argumento científico que demuestre que no hay Dios.

No sólo no hay contradicción entre Ciencia y Fe, sino que mutuamente se ayudan y complementan. Las aparentes contradicciones entre la Fe y la Ciencia, se deben a.

El conocimiento científico experimental no es el único modo de conocer. El razonamiento filosófico o metafísico no es como el científico, Tampoco sirve para demostrar el amor de una madre o la fidelidad de un esposo, aunque todo esto sea una realidad.

A quien no cree se le puede decir: - que negar a Dios, no es destruirle. - y, también, que si no cree en el más allá se va a enterar en cuanto se muera. La fe es razonable. Hay muchas más razones para creer que Dios existe que para dudar de su existencia. Las razones para creer son suficientes, pero no evidentes pues Dios quiere que el hombre le acepte libremente .

El fideísmo, que es creer sin pruebas. No se puede fundamentar la fe sobre la duda y la inseguridad. No puede existir una pastoral convincente si no se razona la fe. A nadie le atrae dar un salto en el vacío sin garantías. En las cosas importantes todos queremos seguridad. Las verdades de fe son razonables y ciertas.

Para creer, “hace falta limpiar los ojos”. Se requiere - disponibilidad, - receptibilidad, - sin interponer condiciones. - Purificación de prejuicios. - Purificación de sentimientos.

Para alcanzar la fe también hace falta orar ¿Como puede orar un ateo, que no sabe si hay Dios? El que se encuentra perdido en un bosque.

Carlos de Foucauld (1858-1916) oficial del ejército francés que encontró la fe, a los 28 años, rezaba: «Dios mío, si existes, haz que te conozca» Diez congregaciones religiosas y ocho asociaciones de vida espiritual han surgido de su testimonio y carisma

Pues bien, ningún ateo consecuente podrá eliminar, en conciencia, al menos, la sospecha de que haya Alguien. Ya lo dijo Pascal: No hay más que dos clases de personas a las que se puede llamar razonables: - aquellos que sirven a Dios con todo su corazón, porque lo conocen; y - aquellos que buscan a Dios con todo su corazón, porque no lo conocen .

El hombre añora lo religioso. Setenta años de ateísmo militante en la U.R.S.S. no han podido acabar con la fe del pueblo ruso que ha resurgido con fuerza mientras rodaban por el suelo las estatuas de Lenin y Stalin.

Si la Religión no obligara a tener a raya las pasiones, nadie tendría dificultades contra la Religión. Y si los preceptos morales dependieran de las verdades de la Física, muchos negarían la Física en lugar de negar la Religión.

La razón no causa la fe sólo cuando el corazón humano se rinde a la gracia en un acto de humildad y sencillez es cuando nace la fe. Humildad y oración

3. Los motivos de credibilidad Constituyen un preámbulo racional de la fe. El hombre se convence por razones, pero es la voluntad la que elige las razones que quiere que le convenzan. El motivo de creer es Dios mismo: no puede engañarnos. Nos ha querido dar unas señales ciertas de su Revelación .

Su Resurrección. Sus milagros. Las profecías: - las que cumple. - las que realiza. Su doctrina: su sabiduría excede la capacidad humana. La santidad y fecundidad de su Iglesia

4. El conocimiento de fe Nos hace conocer verdades naturales y sobrenaturales. La fe es cierta, más cierta que todo conocimiento. La inteligencia ayuda a profundizar en la fe.

Santo Tomás de Aquino San Agustín Santa Teresita de Lisieux Santa Teresa de Ávila La teología es la ciencia de la fe: se esfuerza, con la ayuda de la razón, por conocer mejor las verdades que se poseen por la fe para hacerlas más luminosas en sí mismas más inteligibles . Este afán procede de Dios y va acompañado por el esfuerzo de acercarse más a Él. Los mejores teólogos han sido y serán siempre santos.

5. Coherencia entre fe y vida Toda la vida del cristiano debe ser manifestación de su fe. No hay ningún aspecto que no pueda ser iluminado por la fe. La fe hay que alimentarla. Puede perderse: hay que cuidarla. Hay que difundirla: no es para colocarse debajo del celemín. El celemín es una medida agraria

La fe no debe ser sólo intelectiva, seca fría. Debe ser alegre, optimista, ardiente, que brote de las entrañas del espíritu, y vivifique todo nuestro ser y nuestro obrar. Fe que se ilumine con la cabeza, y se caliente con el corazón.

Buenos Aires, 17 de marzo 2007 Auditorio del CUDES P. Juan María Gallardo [email protected] www.oracionesydevociones.info